Bolsas de plástico, en promedio se los usa 20 min. y tardan 400 años en desintegrarse

 Consumiendo menos y mejor, protegemos el medio ambiente La bolsa de plástico es el producto estrella de nuestra cultura de usar y tirar, que malgasta  grandes cantidades de materiales y energía para fabricar productos efímeros  de un solo uso, muchas veces superfluos. Las bolsas de plástico se pueden reemplazar fácilmente por recipientes duraderos y ecológicos. En España utilizamos unas 250 bolsas por habitante y año. Tanto su fabricación y distribución como su tratamiento posterior provocan importantes problemas ambientales. Por todo ello consideramos que es necesaria su desaparición.
Un uso abusivo Como suelen ser gratuitas se consumen sin medida e incluso se utilizan muchas más de las necesarias. Una bolsa de plástico tiene una vida útil media de 12 minutos y para su producción y distribución consume agua, energía y el coste ambiental del petróleo. Una vez convertida en residuo tarda más de un siglo en degradarse. En los últimos 10 años, su consumo ha aumentado un 47% y se sitúa en unos 13.000 millones de bolsas de plástico de un solo uso (100.000 toneladas) al año. Es muy fácil eliminar este  residuo tan perjudicial para el medio ambiente y fácilmente sustituible por sistemas tradicionales reutilizables y de larga vida.

Razones para decir NO a las bolsas de plástico
• Se fabrican a partir del petróleo, un recurso no renovable, costoso, cada vez más escaso y responsable de la emisión de gases de efecto invernadero, es decir, del cambio climático.
• Su reciclaje no es rentable: cuesta 100 veces más reciclarlas que producirlas nuevas.
• La mayoría acaba en el mar o quemada en las incineradoras y en los hornos de cemento. Se han encontrado bolsas flotando al norte del Circulo Ártico y en lugares remotos del Atlántico Sur.
• Contaminan durante su fabricación y su incineración (dioxinas, cianuro de hidrógeno…).
• A menudo están impresas con tintas tóxicas.
• Tardan entre 150 y 1000 años en descomponerse.
• Su dispersión en la naturaleza causa mortandad de animales en el medio terrestre y acuático. Las tortugas, los delfines o los cachalotes, por ejemplo, se las comen porque las confunden con  medusas y calamares. Es cada vez más frecuente encontrarlas en cadáveres de animales marinos porque provocan el bloqueo, irritación o laceración del tracto digestivo y reducen la cantidad de alimento que los animales pueden ingerir.
• Son de fácil sustitución por sistemas tradicionales: bolsas de tela, carritos, cestas, de papel..


I♥ Cochabamba (comunidad) y Cochabomba (Blog)  Proponemos:
1. Hacer un pequeño esfuerzo desde los ayuntamientos, entidades ciudadanas, gremios de  comerciantes y cadenas comerciales para animar al  consumidor y a los comercios a sustituir las bolsas de plástico gratuitas
por otro tipo de recipiente más resistente y duradero.
2. Los acuerdos voluntarios de sustitución o de cobro serían idóneos para frenar el consumo generalizado de bolsas. Pero como puede ser insufi-ciente, necesitamos además acciones decididas destinadas a limitar el consumo de bolsas de plástico.
3. Que el Gobierno grave el consumo  indiscriminado y gratuito de bolsas
de plástico con un impuesto ecológico lo suficientemente elevado para ser
disuasorio. Ese dinero no lucraría al comerciante sino que se invertiría en investigación y desarrollo de tecnologías de producción limpia que minimicen la generación de residuos y en mecanismos para eliminar las bolsas de un solo uso.

Reducir la basura es luchar contra el cambio climático

Informe Especial OPINION

Plásticos: Se fabrica en un segundo y tardan 400 años en desintegrarse


 
Las bolsas plásticas son residuos sólidos inorgánicos, producidos en base a petróleo, en cuya producción se genera dióxido de carbono que empeora el calentamiento global y el cambio climático, explica la Liga de Defensa del Medio Ambiente (Lidema).



Sólo las bolsas tardan, en promedio, un segundo en producirse, veinte minutos en utilizarse y 150 años o más en desintegrarse y reintegrarse a la naturaleza. Entretanto, ocasionan daños al ambiente y a la salud de los suelos y animales.
Según la Dirección Especial de la Secretaría de Protección de la Madre Tierra de la Alcaldía la degradación de bolsas plásticas puede tardar hasta más de 400 años.
“Es como asfixiar a la tierra, por el contenido y por el tipo de material”, expresa Germán Parrilla, director especial de esta secretaría que explica que el ciclo de humectación de la tierra se ve seriamente afectado y que además su descomposición genera contaminación ambiental.
La bolsa plástica no permite que haya humectación y puede causar la desertificación de los suelos, es decir, que se presenta un proceso de degradación ecológica en la que el suelo fértil pierde total o parcialmente su potencial de producción.
También está la contaminación por la descomposición de los componentes nocivos de los plásticos. “Son químicos que se van filtrando a las venas de agua y éstas los conducen a los ríos, afectan a los animales, a los peces y esto pasa hasta el mar”, resume Parrilla para explicar las consecuencias de cambios climáticos inesperados y enfermedades que se registran.
La imposibilidad de humectación y la contaminación se suman a los efectos casi inmediatos que se presentan durante la época de lluvias. 
La falta de educación ambiental en los ciudadanos hace que los plásticos se acumulen en calles, avenidas, torrenteras y desagües causando inundaciones por taponamientos en las ciudades.

NI EL CAMPO SE SALVA

Los estudios de la Fundación Suiza de Cooperación para el Desarrollo Técnico - Swisscontact demuestran que ni siquiera las zona rurales se libran de las bolsas plásticas.
“Incluso los animales se comen esas bolsas, se les hincha la panza y mueren”, señala la coordinadora de Swisscontact, Carola Ortuño, asegurando que se ha expandido tanto el uso de las bolsas que la gente no se da el trabajo de guardar una bolsa para reutilizarla, sino que va cómodamente a un lugar de venta donde obviamente se sabe que tienen las bolsas nylon.
El crecimiento demográfico aporta también al incremento en la generación de residuos sólidos por consumo y desecho de las bolsas nylon y otros plásticos. 
Los plásticos se acumulan junto al resto de la basura sin realizarse ningún tipo de selección previa y son el principal riesgo cuando llegan a taponear alcantarillas o los sistemas fluviales.

El reciclaje de las bolsas es costoso

Las bolsas nylon son las más costosas para reciclar por eso es que los ambientalistas recomiendan en la medida de lo posible disminuir su uso al máximo.
Swisscontact explica lo costoso que es reciclar las bolsas nylon que, por lo general, se utilizan para llevar alimentos y otros productos.
“Son difíciles de reciclar, se recuperan muy pocos gramos de plástico y habría que lavar las bolsas. Eso es caro”, manifiesta Carola Ortuño comparando el proceso con el de las botellas pet (poliéster termoplástico) que se pueden recuperar en origen, una vez que las utiliza cualquier vecino, y se garantiza además la limpieza.
Existen fábricas de plásticos que también producen bolsas nylon. Swisscontact considera que si bien se trata de un buen negocio para las empresas también existe la posibilidad de introducir en el mercado bolsas que se pueden degradar en 18 meses o dos años.
“Eso ya es de menor impacto ambiental. Es más caro, pero para limpiar nuestro entorno hay que hacer inversiones”, sostiene Ortuño manifestando que el cambio de actitud de los ciudadanos depende a futuro de políticas municipales, empresariales y de un trabajo sostenible en instituciones de educación.
Este cambio deberá darse también en tiendas de barrio, mercados y supermercados con la sustitución del nylon.

Los riesgos ambientales del plástico

La tierra.

Los plásticos impiden la humectación de terrenos; la descomposición contamina las venas de las aguas que llegan hasta los ríos y que luego van hasta los mares.

20 Minutos

Es el promedio de tiempo que se requiere para utilizar una bolsa plástica que ha sido fabricada en un minuto.

400Años

Son necesarios para que los plásticos se reintegren nuevamente a la naturaleza, entretanto, contaminan y amenazan al medio ambiente.

FUENTE: OPINIÓN.

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